FLESHGOD APOCALYPSE - "Opera" (Nuclear Blast 2024)

El nuevo álbum de Fleshgod Apocalypse, “Opera”, es una experiencia intensa y deslumbrante que eleva el concepto de death metal sinfónico a niveles muy altos. Tras la recuperación de Francesco Paoli de un accidente casi mortal en 2021, la banda ha canalizado esa experiencia traumática en una obra que combina la brutalidad técnica con una profunda carga emocional.

El disco destaca por la integración impecable de elementos sinfónicos y melódicos con la ferocidad del death metal, algo que Fleshgod Apocalypse llevan haciendo años, pero en “Opera” han alcanzado otra dimensión. Desde el arranque con "Ode to Art (De' Sepolcri)", queda claro que la orquestación no es simplemente un adorno, sino una parte esencial para entender cada sentimiento, cada sensación que se intenta transmitir a través de las letras. Las cuerdas, los metales y los coros, junto con la voz de la soprano Veronica Bordacchini, pintan un paisaje musical que a menudo parece sacado de una ópera macabra, todo mientras las guitarras y la batería descargan una furia implacable.

La interpretación de Bordacchini es clave en este álbum, ya que ha pasado de ser una colaboradora puntual a una figura central en el sonido de la banda. Sus vocales operísticas no solo añaden dramatismo, sino que también aportan una dimensión emocional y teatral, especialmente en temas como "I Can Never Die", "Matricide 8.21" o la emotiva "Till Death Do Us Part". Su habilidad para alternar entre registros dulces y estridentes proporciona una textura vocal rica y diversa, que se entrelaza perfectamente con los guturales desgarradores de Paoli.

Otro aspecto que eleva “Opera” por encima de trabajos anteriores es la claridad de la producción. Aquí, cada instrumento y cada voz encuentran su espacio sin perder potencia. Jacob Hansen ha logrado un equilibrio perfecto entre las orquestaciones y la agresividad del metal, permitiendo que los elementos sinfónicos brillen sin restar la brutalidad característica de Fleshgod Apocalypse.

En cuanto a composición, la banda ha creado un álbum dinámico que nunca se estanca en un solo estilo o emoción. Desde la fuerza de temas como "Pendulum", con momentos más sombríos y atmosféricos, hasta la velocidad de "Morphine Waltz", la diversidad es muy amplia. Hay pasajes de piano melancólicos, interludios instrumentales que invocan un sentido de fatalidad inminente, y solos de guitarra muy técnicos, pero con mucha fuerza.

El álbum está impregnado de una oscuridad, no solo en su sonido sino en su temática. “Opera” refleja una lucha interna entre el dolor y la redención, una exploración profunda del sufrimiento que se hace evidente en canciones como "Bloodclock", que aborda el miedo a la muerte, y "At War With My Soul", donde la orquesta y las guitarras parecen combatir entre sí en un crescendo apocalíptico. Fleshgod Apocalypse no ha perdido su esencia brutal, pero ha encontrado nuevas formas de expresarla, sin abandonar parte de su esencia death, pero mucho más melódica, en una evolución que les muestra mucho más emotivos y cercanos.

Creo que “Opera” es el álbum más ambicioso de Fleshgod Apocalypse hasta la fecha, además, también uno de los más poderosos, y para mí, de los más completos que han facturado. Con una producción impecable, interpretaciones vocales asombrosas y una composición grandilocuente, este disco consolida a la banda como una de las mejores en el género del death metal sinfónico. Es una obra maestra que fusiona lo trágico y lo épico en un viaje emocional devastador. Una de las cualidades de “Opera” es su capacidad para llegar a emocionarte. Y si un disco consigue tocarte la fibra, es un disco grande!